Todos hemos tenido encuentros con «pediches», mendigos, vagabundos… Gente que se «gana la vida» pidiéndole a otras personas unas cuantas monedas, «lo que sea de su corazón», «nadamás para la ruta», «mi niña está muy enferma y no tengo para las medicinas», y casi siempre termina o con un gracias o con un que dios se lo pague.
Y la mayoría de las personas somos tan generosos y buena gente que terminamos soltándoles aunque sea unos 2 pesitos.
No digo que sea malo darle dinero de caridad a la gente que lo necesita, pero es que hay cada abusón que no lo requiere y otros que hasta se ponen roñosos cuando no les das dinero.
Aquí les van algunos casos de los pediches chafas, abusones y algunas experiencias que tuve al respecto:
· Me cae muuuy mal que los papás y mamás de los niños los manden a pedir dinero solos, con la cara sucia para dar más lástima y otros truquitos. Los usan los muy méndigos, y yo digo que si los papás pudieron tener hijos entonces obviamente deben de tener la edad de trabajar… ¡Eso es explotación infantil! Igual o peor la señora que carga a su bebé o niño pequeño todo el día para conmover a la gente, poniendo una cara triste que casi llora y pidiendo dinero para comer con la voz tan lastimera. Dicen que hay quienes duermen a sus hijos con drogas para traerlos dormidos todo el día y que no den lata mientras andan pidiendo, viejas malditas.
– Es más, justo este jueves andaba con mi novio en un centro comercial, estábamos decidiendo que película entrar a ver en el cine y en eso llega una niña de unos 5 o 6 años lamiendo un rico cono de nieve y nos dice «oiga, me da pa la ruta, es que no tenemos dinero pa la ruta». No le dimos ni máscaras, chale, ya ni la hacen, como no va a tener dinero para el camión si traía un conote de nieve que mínimo le salió en 15 pesos y la ruta cobra 4.50. Además, luego de que le dijimos que no traíamos cambio se fué al Moy (centro de arcade y videojuegos) siguiendo a su mami y llegaron con quien parecía ser su hermanito que estaba jugando maquinitas. Ya ni la hacen, casi nos llega a pedir dinero con un psp o ropa de diseñador… Bueno, tal ves exagero pero si se pasaron de lanzas.
· Qué tal los hombres y mujeres jóvenes y fuertes que se ponen a pedir. Cuando yo los veo así no les doy nada, si pueden trabajar no deberían de andar de pediches. A un viejito todavía le tengo más compasión porque es difícil que le den trabajo, ¡pero si están jóvenes ponganse a trabajar huevones!
– Así anda un gringo en la ciudad, joven de unos 30 y tantos, fuerte, bien vestido, rubio, que te dice en inglés que necesita dinero porque su esposa esta embarazada y esta ya en trabajo de parto y no tiene con que pagar el taxi ni el parto, en fin todo un drama. La primera vez que me lo topé fue en un wendys y le medio creí (sí, toda inocente me la creí), pero hace poco como una semana me lo volví a topar con la misma historia, «no hablo inglés, no le entiendo» le contesté, claro que lo reconocí y me pareció imposible que su esposa estuviera en trabajo de parto desde hace más de 3 meses…
· Los limosneros con garrote son horribles, esos que te piden y que si no les das lo que quieren todavía se enojan, ma´ pos estos.
– Así llego una vez un chavillo a tocar a mi casa pidiendo «pa un taco» porque tenía mucha hambre, mi má me dijo que le diera una fruta y una lata de comida, pues antes de que se la pusiera en la mano se hizo el ofendido y dijo «no, comida no, dinero» y me vio con cara de enojo e indignación. A canijos, me quedé pensando «¿qué no cuando tienes hambre lo que quieres es comida?».
Chales… deperdis que hagan malabares, canten o algo para ganarse unos pesitos ¿no?.