El buen fin es la respuesta de las empresas de México al Black Friday, o Viernes Negro, el día en que muchas tiendas de Estados Unidos rebajan el precio de sus productos y algunos hasta precios ridículos, tan bajos que se forman estampidas humanas en la entrada de los establecimientos… ¿Pasa eso con el Buen Fin en México?

*Risas*

No. No pasa.

Y es que en lo que lleva de existir el Buen Fin, que ya son más de un par de años, las ofertas son ridículas pero no por ser grandes sino por ser pocas y/o inexistentes en muchos negocios.

Una de las peores prácticas es el típico X meses sin intereses. Atentos, eso NO ES UNA OFERTA, la tienda al ofrecer ese método de pago solo se asegura de tener un ingreso constante de dinero por X cantidad de meses, ¿y el consumidor apá?

No es que yo solo me encierre en casa a quejarme sin haber ido a dar el recorrido, casualmente ayer, sábado 15, me pasee por algunas de las tiendas más grandes del rancho donde vivo, y las cosas son más o menos así:

Supermercados – En los supermercados hay ofertas para comprar pan, fruta, leche, ¡yupi!… Digo, ¿eso qué?, ¿hacer fila por los descuentos en un kilo de papas?, ¿ahorrar todo el año para comprar una caja de huevos?. Los anuncios de los supermercados para el Buen Fin siempre me dan risa por esta razón.

Clubes con membresía, grandes almacenes – Hay un Sams en mi rancho y lo único que vi ahí medianamente barato fueron televisiones, montones y montones de televisiones de 40 pulgadas. Las personas llegaban emocionadas con su dinero en la mano para comprar algo súper bueno y barato y se iban resignadas comprando la comida de la semana. Y no es broma, vi mucha gente saliendo del lugar con solo comida en sus carritos y con una cara más o menos de aburrimiento. Yo entre ellos. Nada bueno que comprar y toda la tienda a 18 meses sin intereses, ¿se imaginan?, pude haber comprado un galón de helado de chocolate y pagarlo durante 18 meses.

Tiendas departamentales grandes – Fuí a Liverpool, ninguna súper oferta aquí, eso no es sorpresa pero sí hubo algunos descuentillos que me agarraron desprevenida, como 25% de descuento en videojuegos, 40% en películas. De ahí se me pegaron La Naranja Mecánica y Bayonetta 2, no me pude resistir. Pero lo que más ofrecía la tienda eran –pausa de suspenso– meses sin intereses y pagos mediante su tarjetas de crédito que todo el mundo sabe son del diablo.

A pesar de haber ido a otras tiendas puedo decir que la mayoría estaba por el estilo de lo que ya describí. Unos descuentos del 10% general y miles de meses sin intereses para pagar.

Otra cosa es que unas tiendas inflan el precio de los productos para ponerles rebajas grandes, y yo lo vi pasar en Sanborns el año pasado ya que una semana antes del buen fin me compré la colección de películas de Matrix en Bluray a unos $600 pesos, vaya sorpresa que en el buen fin estaba con un 50% de descuento pero a un precio doble de $1,200 pesos, ¡plop!

Cabe mencionar que ayer yo iba con toda la disposición de gastar mi dinero, el espíritu consumista me había poseído, pero no hubo mucho que pudiera hacer con como están las cosas.

Me da curiosidad si alguien se ha topado con una verdadera oferta del Buen Fin, es como el chupacabras, dicen que existe pero nadie tiene pruebas contundentes.

¿Y bien?, ¿encontraste algo bueno en el Fin Mediocre?

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