Como es época navideña ya vemos llena la televisión con los comerciales de los juguetes que las grandes empresas les quieren vender a los papás para regalarle a sus niños y niñas.
Para niños, no salimos de la violencia, o son pistolitas, o un muñequito (tipo Barbie pero para niños) que tira patadas y dispara lasers. Aún así me parece mucho peor el mercado de regalos para niñas, porque aunque el de los niños sea violento por lo menos es algo fantasioso en el aspecto de que pocos se van a dedicar a «cazar a los malos» o a ser spiderman (a menos que terminen como animadores de fiestas como éste).
Para las niñas tenemos una amplia gama de básicamente lo mismo para escoger, dime, ¿tu qué le regalarías a tu hija?
- Barbie niñera, maestra, veterinaria o cualquier tipo de profesión que involucre cuidar de otro ser (porqué no sacan barbie ejecutiva, barbie bombera, mecánica, científica, panadera…).
- ¡Hornito mágico!, para que tus hijas aprendan desde niñas a cocinar, o hagan como que cocinan, también hay trastecitos, ¡luego podrás comprar una minilavadora de ropa!
- De lo que hay más, muñequitos de bebés. Este es el mercado más grande, con este tu niña aprenderá a cuidar a un niño, a darle de comer, bañarlo, ¡si hasta hay unos que hacen popó, yujuuuu!. Y luego la gente se queja de que su hija se embaraza a los 15 años, ¿qué les molesta? si desde los 4 años la estaban educando para eso.
- Casi lo olvido, me faltaba mencionar la moda, muñequitas a la moda, o maquillaje de fantasía, fashionistas a todo lo que da…
Con esto, como niña, tienes pocas opciones, o aprendes a andar a la moda o vas estudiando desde los 4 años para aprender a ser ama de casa y estupenda mamá. Claro, a menos que tus papás te regalen un libro, un juego de química principiante, una consola de videojuegos, y de consecuencia todas tus amiguitas te acusen de machetona o niña poco femenina.
Hasta aquí se escucha como que estoy muy traumada con mi niñez, pero la verdad siempre me ha gustado ser diferente, aunque también tuve muñecas y jugaba a hacer pastelitos.
¿Pero no me digan que no esta muy miserable el mercado de regalos?, listo para lavarles la pequeña cabecita.
Me acordé de la niña que quería ser modelo.