Me invadió este fin de semana un enorme letargo (weba, flojera, pereza) por bloggear. Y recuerdo con nostalgia las veces que actualizaba hasta 3 veces por día.
¿Tendrá algo que ver el frío?, es que pienso yo que cuando hace frío más flojera te da de hacer las cosas. Como cuando tienes que salir de casa temprano y estas en tu cama con un montón de cobijas, agusto, calientito, y de sólo pensar en que te tienes que destapar te dá frío.
Aunque ya pensándolo si salí de casa y todo, nomás ni toqué el blog desde que cambié el header y pues, eso no lo cuento como contenido, sino como cambio visual.
Creo que simplemente me topé con una duda existencial concretamente sobre mi blog.
¿Para qué bloggeo?, ¿porqué?, ¿qué me gano?, ¿me tengo que ganar algo?, ¿no lo hago simplemente por gusto?, ¿y ahora qué posteo?…
Me sentaba frente a mi computadora y nunca ingresaba al panel de control de mi blog, ni siquiera entraba al MSN, es más, en todo el fin de semana no me aparecí como se debe por estos rumbos.
Nada.
Porque sentía que si me aparecía por algun lado algunos amigos/conocidos del internet me reclamarían. ¿Qué?, ¿pensé que me reclamarían?… Sí, eso pensé, como si bloggear fuera una obligación.
De haber entrado a mi panel de control en mi blog, siento que habría publicado algo nomás por publicar. Y odio eso. Si bien antes he publicado tonterías lo he hecho por puro gusto, nunca por compromiso.
¿Porqué publicar en un blog?, ¿Qué pasaría si desde hoy lo dejo de hacer?.
Sería más tiempo para mí que podría invertir en otras actividades, como ir al gimnasio, aprender muchas de las cosas que estan en mi lista.
Y bien, léanme, terminé aquí otra vez. Creo que cuando le agarras el gusto a bloggear no lo puedes dejar.
Me pregunto… ¿seguiré bloggeando cuando me case y tenga hijos?, si es que eso suecede. ¿Seguiré bloggeando cuando tenga un trabajo?. Y cuando me muera ¿este blog simplemente desaparecerá?, o tal vez se lo herede a alguien. Aún no tengo ni idea de que pueda pasar con este blog en un futuro. Pero si se que hoy lo sequiré manteniendo. Heme aquí.
Bloggeo porque me gusta, y no hay razón más poderosa. Es lo mismo que me hace volver.
Aún hay kozmica.com para rato.
Pero cuando no sabes que postear, ni porqué mantienes un blog, cuando te entra el letargo y la duda existencial, no hay nada mejor que dejarlo de lado un rato. Luego de eso, volver más ligero y fresco.