Si no sabes qué es twitter es porque vives debajo de una roca (lee esto). Y para los ya iluminados pues sigamos.
Algunos twitteros profesan la reciprocidad como una virtud suprema en el rollo este del microbloggin’, diciendo algo más o menos así:
Si te followean debes followear, si no lo haces eres malo, pedante, diva, y te irás al infierno de los twitteros.
Claro, exageré un poco pero en esencia es lo mismo.
No entiendo, no estoy de acuerdo con esa «filosofía», y no es por ser diva, ni payasa, ni sentirme más ni nada de eso, es que no lo veo ni práctico ni cómodo ni lógico.
Soy de esas que no siguen a muchos, no sé como le hacen los twitteros que siguen a 300, 400 y más personas, esos son muchos updates en tu timeline, es más, hay algunos que siguen de a mil para arriba ¿alcanzan a leer algun tweet?.
Ni siquiera me estoy fijando a cada momento quien me sigue (eso lo hacía al principio nomás), en realidad, el criterio que sigo para followear a alguien se basa en la interacción, usualmente cuando comienzo a intercambiar replies con otros frecuentemente los foloueo o si me interesan mucho sus updates.
Me vino a la mente un post que leí en alt-tab sobre los ratios. Tu ratio como usuario de twitter es el número de personas que te sigen entre el número de personas que sigues, entonces mi ratio en este momento es de 7, alto porque me siguen más de los que sigo yo.
En dicho post están clasificados los distintos tipos de usuarios por su ratio, y resulta que soy una diva o twitterdiva (twitterdiva me recuerda a narcomanta), precisamente por mandar a la fregada la reciprocidad.
Y no me molesta, pero me gusta creer que en lugar de diva soy una persona «selectiva».
¿Tú eres reciproco?